José Luis Cantos
Nació en Murcia, no importa demasiado cuándo ni cómo. Descubrió que escribir era como respirar, y decidió alimentar al duende, su vocación. El duende creció y engordó, y los relatos de José Luis empezaron a aparecer en diversas antologÃas.
En 2013 empieza a volar solo. El ojo en la cerradura -una antologÃa de microrrelatos publicada en formato digital por Ediciones del Cruciforme- es su primera publicación en solitario. A esta le siguió Relicario para insomnes, en el 2014, antologÃa de terror fosco y fantasÃa oscura, editada en papel por Saco de Huesos.
Fue, además, colaborador del portal extinto Cultura Hache, coordinador de la antologÃa Hasta siempre, princesas (Libralia) y es miembro de NOCTE.
Llegó a SimetrÃa de la mano de DarÃo Vilas y Rafa Rubio. Nada más pisar las calles de la isla supo que aquel era su lugar. De ahà que no dudara en embarcarse en Girando en SimetrÃa, segunda antologÃa de relatos ambientados en la isla, escrita junto a Vilas, Rubio e Ignacio Cid Hermoso y que no tardará mucho en ver la luz.
Mientras que otros huÃan despavoridos de la isla, José Luis decidió quedarse allÃ, enredado. Asà perpetró Telaraña (tÃtulo provisional), novela ambientada en la ciudad, y que amenaza con ser publicada, para desgracia de los débiles de estómago.
A dÃa de hoy, sigue alimentando al duende con relatos y novelas que quién sabe si algún dÃa serán editadas. Eso no importa. Hay que alimentar al duede. Alimentarlo, alimentarlo, alimentarlo... Hasta que el maldito reviente.